Primera exposición en Europa de la artista crítica china Yin Xiuzhen

ÁNXEL GROVE

• La Kunstahlle de Dusseldorf presenta las nuevas instalaciones textiles de la creadora, nacida en 1963 en Beijing, ciudad en la que todavía reside.
• Xiuzhen censura la degradación ambiental y la unificación del pensamiento.
• Su obra señala a la superpoblación de las ciudades y las condiciones de trabajo inhumanas que han convertido a China en el primer productor textil del mundo.

La propaganda artística, tan mediatizada e interesada como cualquier otra, puede hacernos creer que China es una país de pocos creadores —incluso de solamente uno, el ubicuo y perspicaz Ai Wei Wei, que se sabe vender con un alto grado de éxito—. La realidad es mucho más rica y compleja, por supuesto.

Una buena oportunidad para descubrir a una gran artista contemporánea china es la exposición que la Kunsthalle de Dusseldorf (Alemania) dedica desde el 15 de diciembre a Yin Xiuzhen. La muestra, que estrá en cartel hasta el 10 de marzo de 2013, es al primera individual en Europa de una creadora comprometida y valiente que nació en Beijing en 1963 y sigue residiendo en esa ciudad.

Llamó la atención en Venecia en 2007

Desde que llamó la atención en la Bienal de Venecia de 2007 con sus poderosas instalaciones efímeras que hacen referencia a los problemas ambientales y de superpoblación de China, la artista ha seguido trabjando en la misma línea. En la muestra de la ciudad alemana expone instalaciones antiguas, algunas de las cuales solamente perviven en fotos, y nuevos trabajos, casi todos realizados en textiles.

Desde 2000 Xiuzhen ha dado un giro distintivo a sus obras, eligiendo la ropa de segunda mano —que obtiene de los contenedores de basura y reciclaje— como materia primaria para reflexionar sobre el acelerado crecimiento urbano y sus consecuencias. Un gran amasijo de piezas textiles conforman un cerebro en Subconsciente Colectivo (azul) (2007) y la maquinaria de un automóvil en Motor (2008) para presentar una metáfora sobre la sobreestimulación provocada por el ritmo de vida de las grandes ciudades y su efecto en el subconsciente colectivo y referirse al motor como corazón mecánico de las personas.

"Repensar la idea de hogar"

Aviones, transportes públicos y carreteras son también motivos de otras esculturas de gran formato en las que la

Fuente: 20 minutos
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